Blogia
L a P e d r @ d a

Ante el próximo fallo de Atlanta, sigue siendo indispensable la solidaridad con los Cinco

Ante el próximo fallo de Atlanta, sigue siendo indispensable la solidaridad con los Cinco Ricardo Alarcón de Quesada
2003-12-18


El Parlamento cubano se pronunció por multiplicar los esfuerzos para poner fin al silencio y promover la solidaridad mundial en favor de la liberación de los cinco cubanos que injustamente cumplen largas condenas en cárceles de Estados Unidos.

Ricardo Alarcón, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, actualizó este lunes a los diputados sobre la marcha del proceso de apelación presentado a la Corte de Atlanta por Gerardo Hernández, Fernando González, Ramón Labañino, Antonio Guerrero y René González.

Alarcón significó la necesidad de intensificar las acciones solidarias para hacer realidad el regreso de los cinco luchadores antiterroristas, ante la cercanía de la vista oral prevista para el 10 de marzo próximo, sorprendentemente en la ciudad de Miami. Manifestó que la posición de la defensa es muy fuerte y su argumentación jurídica muy completa, frente a los errores y fallas de la Fiscalía y de la jueza, pero aclaró- se trata de un caso fuera de lo común, que evidencia los propósitos de Estados Unidos y de Miami de condenar a la Revolución y el pueblo de Cuba.

Argumentó cómo estos cinco cubanos encaran penas exorbitantes por la única razón de haber luchado contra el terrorismo, y sin mostrarse pruebas que respalden los 24 cargos por los que, de conjunto, fueron sancionados en un amañado y extenso juicio.

Están presos por nosotros, se han sacrificado por un pueblo entero, han sacrificado su juventud y su vida, enfatizó el líder parlamentario, al recalcar la necesidad de redoblar las energías de los cubanos para lograr su libertad, como una motivación primordial para el año que se avecina.
No solamente enfrentan la injusticia del encarcelamiento, sostuvo, sino que contra ellos se está produciendo un trato inhumano, equivalente a fórmulas de tortura y que deviene violación de sus derechos individuales y los de sus familiares, reconocidos por todas las convenciones internacionales.

Este martes se celebrará el segundo período ordinario de sesiones de la sexta legislatura del Parlamento cubano.

PALABRAS DE RICARDO ALARCÓN

Versión de las palabras de Ricardo Alarcón, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, en la sesión especial previa al inicio Segundo Período ordinario de Sesiones del máximo órgano de gobierno de la República de Cuba, correspondiente a la VI legislatura. Ciudad de La Habana, 22 de diciembre del 2003.

Ya está fijada para el 10 de marzo la fecha en que tendrá lugar la audiencia sobre este caso. Esta audiencia es una reunión entre los tres jueces que van a examinar la Apelación en primera instancia y los argumentos de los abogados que representan a los Cinco compañeros por una parte, y de los abogados que representan a la Fiscalía General de los EE.UU, en particular la del distrito sur de la Florida que fue la que los acusó.

No es otro juicio, no es una vista pública en la que concurran testigos, donde se presenten pruebas, donde estén los acusados. Nada de esto. La Apelación es un proceso básicamente de carácter documental. Quienes apelan, en este caso los que fueron condenados –lo hacen a través de sus abogados-, presentan unos documentos escritos donde argumentan por qué la condena fue injusta, en qué aspectos legales se violó la ley. Presentan todo el conjunto de argumentos para refutar los cargos por los que fueron condenados y las sentencias que les fueron impuestas.

La Fiscalía, que representa al Gobierno, responde a esos documentos con otro documento que justifica lo que se hizo. Luego de esta respuesta de la Fiscalía, se le da una oportunidad a los abogados defensores de replicar con otro documento. Esto solo forma varios centenares de páginas con una fuerte argumentación jurídica, con mucha argumentación de carácter legal. Ya esto está presentado. Puede o no darse la reunión del 10 de marzo en EE.UU. Sin embargo, en este caso, a solicitud de la defensa, el Tribunal de Apelaciones de Atlanta accedió a que haya esa reunión, que es una oportunidad para esclarecer algunos aspectos técnicos contenidos en estos documentos presentados por ambas partes.

La reunión va a tener lugar, como les dije, el 10 de marzo. Se le ha concedido 15 minutos a la defensa para explicarse. Como son cinco acusados, se les da 3 minutos por abogado defensor. También, quince minutos a la Fiscalía para responder a todas esas explicaciones.

Esta reunión tendrá lugar en Miami, algo que siempre nos sorprende y nos provoca cierta alarma, porque uno de los puntos precisamente que está en la apelación y que la defensa cuestiona es que un juicio como este tuviera lugar en esa ciudad donde no hay las condiciones mínimas para que se produzca un proceso imparcial.

De todas formas, no va a haber un juicio en Miami. Lo que va a ocurrir en Miami es una reunión, a la que irán tres magistrados que no se sabe quienes son, para oír a ambas partes.

Hay una cosa muy importante: la fecha. No solo porque hayan escogido el 10 de marzo para una actividad legal en Miami. Todo el mundo asocia esta fecha con determinados acontecimientos de nuestra historia -que están muy asociados a la ciudad de Miami, por cierto-, y esa fecha sugiere que la conclusión de la Corte de Atlanta va a ser más bien pronto. Aunque no hay nada establecido, es usual que los fallos de las cortes de apelaciones se produzcan en una fecha más o menos cercana al momento en que tiene esa reunión con los abogados de las partes.

LA APELACIÓN: EL FINAL DE LA META JURÍDICA

Ustedes habrán visto en la prensa, declaraciones, especulaciones sobre cuándo sería que se produciría el fallo del tribunal. Se ha llegado hasta hablar del año 2005. El hecho de que hayan fijado la fecha de esa reunión relativamente tan temprano, más bien sugiere que debemos esperar que sea en una etapa relativamente temprana del año 2004 cuando habrá de producirse el fallo de Atlanta. Es raro que pasen muchos meses después de esa reunión con los abogados antes de que ellos se pronuncien.

Según la práctica norteamericana, muchas veces cuando llega esa fecha ya han llegado prácticamente a una opinión esos magistrados, y lo hacen en esa reunión es aclarar o precisar algún punto para concluir el proceso de su toma de decisiones. Esto es importante, porque nos estamos acercando bastante al momento en que la Corte de Apelaciones emitirá su fallo. Desde el punto de vista jurídico, desde el punto de vista del procedimiento legal es el momento final, porque después de la Corte de Apelaciones de Atlanta se puede apelar a toda la Corte de Atlanta, a todos los magistrados que integran esa corte, quienes darían un fallo que es prácticamente la última etapa, el último paso desde el punto de vista técnico-jurídico.

Después, lo que queda es la posibilidad de recurrir al Tribunal Supremo, pero éste no tiene la obligación de revisar ese caso ni ningún caso. Ahí termina el sistema judicial norteamericano. Según la experiencia práctica, apenas un dos por ciento de los casos que llegan al Supremo se examinan.

Por supuesto, nosotros seguiríamos esta batalla en todos los planos, incluyendo el legal, si la decisión de Atlanta no fuese completamente favorable. Es decir, que si hay algún aspecto que para la parte cubana sea inaceptable vamos a usar todos los medios, independientemente de que se pueda o no, que se alcance o no se alcance. Va a seguir otra batalla. Pero normalmente desde el punto de vista técnico- jurídico debemos ver ahí la meta final. De ahí la importancia que tiene esa decisión ya anunciada, porque es posible que, cuando nos volvamos a reunir, tendremos frente a nosotros un fallo emitido por la Corte de Apelaciones.

Estamos ante un caso en que la posición de la defensa es muy fuerte. Si esto fuera, sencillamente, decidir por parte de unos jueces -haciendo abstracción de cualquier otra consideración, de cualquier factor externo-; si fuera, sencillamente, decidir con los papeles que tienen delante, todas las personas que han visto esta inmensa papelería nos han dicho que nosotros debemos ganar, al menos en algunos puntos fundamentales. Es así porque la argumentación jurídica es muy fuerte y los errores, los fallos, las violaciones cometidas por el gobierno en la acusación y por la jueza, son evidentes. Por lo tanto en condiciones normales debería ser una batalla legal ganada.

Pero, por supuesto, no se trata de un caso común y corriente. No es algo de lo que se pueda esperar una determinación solo a partir del hecho evidente, como demuestran los abogados defensores en sus escritos. Hubo violaciones y errores, pero se trata de un caso político, un caso en el que nada más y nada menos se enfrenta el pueblo y la Revolución cubana con el imperialismo norteamericano. Por lo tanto, los factores extrajudiciales tienen una enorme importancia. Eso hace indispensable la lucha por promover la solidaridad, por lograr que más allá de lo técnico-jurídico se movilice la opinión pública, que haya una preocupación por el tema que de alguna manera contrarreste la presión que va a existir, que ha existido a lo largo del proceso, que existe para que no se haga justicia.

LA CONSPIRACIÓN PARA COMETER ESPIONAJE

Se trata de Cinco compañeros condenados. Contra todos ellos, juntos, se han presentado 24 cargos, repartidos, por supuesto. Se concentran en uno todos los cargos y los demás tienen tres, a veces cuatro, según las acusaciones. En relación con lo puramente jurídico hay tres cuestiones fundamentales que son el centro de esta batalla:

Primero: La que fue usada -y todavía lo es- en los medios de prensa, la acusación de espionaje o la idea de que se trata de unos espías cubanos capturados en EE.UU. En primer lugar, a tres de ellos no se les acusó de haber practicado el espionaje, sino de haber conspirado para hacerlo, que no es exactamente lo mismo. “Conspiración”, en la ley norteamericana, es cuando dos o más personas se ponen de acuerdo para hacer algo y eso no significa necesariamente que lo logren. Dos o tres personas y un acuerdo son los elementos que conforman una conspiración. Ahora, probar una conspiración es caer en un terreno mucho más subjetivo que probar un hecho concreto. Es decir, un espía es una persona que obtiene una información secreta, una información que protegen las autoridades, porque su relevante contenido puede perjudicar el interés de ese Estado.

Eso es lo que se llama espionaje en todas partes del mundo y la ley norteamericana es muy precisa sobre eso. Conspirar es ponerse de acuerdo dos o tres personas para hacer algo y no hay que probar que haya obtenido un secreto, que haya robado un secreto, que lo haya trasmitido a un gobierno extranjero. Solo basta con convencer a un jurado que esas tres personas estaban conspirando para ver si algún día realizaban ese supuesto delito. Esto tiene mucho que ver, por supuesto, con el lugar en que se realizó el juicio, porque un jurado de Miami, de personas que viven en Miami, que tiene que mandar sus hijos a escuelas de Miami, es lo que viciaba todo ese juicio desde el comienzo. Un jurado de ese tipo puede convencerse más fácilmente de esa supuesta conspiración. Un jurado imparcial, en otro lugar, hubiera exigido más elementos objetivos para convencerse de que realmente los acusados querían hacer eso que el gobierno pretendía probar.

Sin embargo, en la prensa y los medios, desde el primer día se les identificó como espías. O sea, que no solamente conspiraron sino que también actuaron y realizaron el acto de espiar. Sin embargo, no fue así en el juicio. Desde antes del mismo comienzo del juicio, el gobierno aclaró al jurado, por voz del Fiscal, que no iba a presentar ninguna prueba por ningún hecho de espionaje. El Pentágono, en vísperas del juicio, emitió una declaración oficial aclarando que no había absolutamente ocurrido nada que hubiera puesto en peligro la Seguridad Nacional de los Estados Unidos, que no había habido ninguna información secreta que hubiera sido pasada a manos del gobierno de Cuba.

Además de eso durante el juicio concurrieron varios expertos, algunos llevados por la defensa y otros llevados por la Fiscalía, ex oficiales de muy alta graduación. Por ahí pasaron generales, almirantes, coroneles, todos en retiro y uno tras otro, ante la pregunta, bajo juramento, de que si habían visto algo en las pruebas o en los documentos que ellos revisaron que indicase que estos compañeros hubieran obtenido algún secreto, todos dijeron no, nada de eso. Cuando preguntaron que si encontraron algo que indicara que habían tratado de obtener algún secreto, dijeron que tampoco había nada de eso. El colmo fue que un alto oficial, llevado como experto de la fiscalía en materia de espionaje, respondió exactamente igual: no hay nada de espionaje aquí, ni nada que indique que les dijeron que tratasen de obtenerlo.

Aún así tres compañeros recibieron la condena a cadena perpetua por conspiración para cometer espionaje. Aparte de que no se probó y de que hubo testimonios que afirmaban lo contrario, este hecho solo se explica por el lugar donde ocurrió el juicio, con sentencias evidentemente exageradas. En este momento en Estados Unidos hay dos casos famosos de personas que se les acusó de espionaje -no de haber conspirado, sino de haber obtenido y enviado información a un gobierno extranjero. Es el caso de dos personas que transmitieron información secreta del gobierno norteamericano al gobierno ruso y al de Israel. Ellos fueron sentenciados también a cadena perpetua. De manera que por haber realizado a cabalidad un hecho se condenó igual que a nuestros compañeros, quienes, supuestamente, se pusieron entre ellos para ver si un día hacían algo semejante. Ahí entonces se ve la desproporción, el ensañamiento que tuvo lugar en un caso donde evidentemente estaban claros la manipulación y el sentido político de un juicio que trató de hacerse contra la Revolución cubana y el pueblo cubano.

EL CARGO PARA COMETER ASESINATO EN PRIMER GRADO

El otro elemento fundamental es el llamado cargo 3 esgrimido contra Gerardo Hernández, acusado también de espionaje. Este cargo es de conspiración para cometer asesinato en primer grado. La palabra conspiración le evita a la Fiscalía la necesidad de probar el acto sustantivo, que sería el asesinato. No uno cualquiera, sino uno en primer grado, con premeditación, a sangre fría,

Este cargo se refiere al incidente de las avionetas del 24 de febrero de 1996. En esa fecha fueron derribadas dos avionetas sobre el espacio aéreo cubano, muy cerca de esta parte de la Ciudad de La Habana. De manera que cabría cuestionarse qué tiene que ver un individuo con algo que fue particularmente de un Estado en defensa de su soberanía y en todo caso la responsabilidad de otro estado, Estados Unidos, que permitía que se violase durante años las leyes internacionales y las de Cuba. De una manera muy manipulada la fiscalía acusó a uno de los compañeros de ese hecho, como si él hubiera sido responsable, a pesar de que era una persona que vivía lejos de los acontecimientos, sin ninguna relación directa con el hecho.

Este cargo no estaba presentado originalmente contra ninguno de ellos. Ellos fueron detenidos en septiembre de 1998, se le formularon varios cargos, pero no este. En el mes de mayo del siguiente año, cuando estaban en el hueco, donde estuvieron los primeros 17 meses después de su arresto, la fiscalía presenta una nueva acusación que incluye este cargo. A partir de ahí se crea una situación en Miami de histeria tal, que hizo más difícil e inconcebible un juicio imparcial en esa ciudad, porque ya no se trataba solamente de cinco agentes de la Revolución cubana que supuestamente espiaban dentro de Estados Unidos, sino que además la Fiscalía presentaba a uno de ellos como asesino de cuatro personas que tripulaban dos aviones salidos de Miami para realizar provocaciones a Cuba y que, a consecuencia de ese incidente, perdieron la vida.

Este caso es desde cierto punto de vista el más grave y a la vez, el punto más débil de la acusación, en torno a él va a girar gran parte delos siete meses que dura el juicio. En mayo del 2001, un mes antes de que este concluya y el jurado los declare culpables, ocurrió un hecho que el propio gobierno de Estados Unidos reconoció que no había antecedentes, que nunca antes algo parecido había sucedido en ese país: la Fiscalía le pidió al Tribunal que modificase el cargo 3, que eliminase la acusación de asesinato en primer grado porque no lo había podido probar, las palabras más o menos textuales fueron: “...esa acusación a la luz de las pruebas presentadas constituye un obstáculo insuperable para nosotros y por lo tanto va a conducir a la absolución del acusado en ese cargo”.... Según ellos mismos, esa afirmación constituía un hecho sin precedentes en la historia de los Estados Unidos. No había antecedentes de una petición al Tribunal, a última hora, de que modificase la acusación. El tribunal de la Florida se negó aceptar, porque ya era muy tarde. El gobierno apeló entonces a la corte de Atlanta y esta tampoco estuvo de acuerdo con modificar el cargo.

En esos momentos los abogados defensores pensaban que tenían la victoria, porque obviamente si ni siquiera la Fiscalía acusa a Gerardo de ese crimen, nadie lo va a encontrar culpable. Y si se caía ese cargo se iba a caer el resto de la acusación. Pero para sorpresa de todo el mundo, ese jurado de Miami encontró a ese compañero culpable de asesinato en primer grado, algo que el propio gobierno decía que no se podía probar, algo que el propio gobierno pedía que fuese retirado de la acusación.

El tercer elemento decisivo es que solamente en Miami es posible imaginar un jurado capaz de tener tanto prejuicio anticubano, de ir más allá incluso de lo que el propio gobierno había reconocido como un hecho incontrastable. Algo que no se podrá probar nunca.
Solo en esa ciudad se hubieran podido obtener sentencias tan duras contra estos compañeros.

Ahora tenemos a tres compañeros condenados por supuesto delito de espionaje, los primeros de la historia de Estados Unidos que están presentados como espías y presos y condenados a la máxima sentencia, sin que se haya presentado una sola prueba de comisión de espionaje. Hay otras personas condenadas por espionaje en Estados Unidos pero en todos los casos esas personas fueron acusadas de algo concreto. Y hay una persona también condenada a una segunda cadena perpetua posiblemente la única persona que esté cumpliendo por algo por lo cual ni siquiera lo acusaba el acusador.

LOS CINCO HAN ESTADO EN EL CENTRO DE BATALLA TITANICA

Quería subrayar otro aspecto, no debemos cansarnos de hablar de este tema y de subrayar la importancia de actuar para promover la solidaridad para defender a los compañeros. Hay algo que yo quería decir aquí: este proceso no lo han llevado cinco abogados. Los Cinco compañeros han sido los elementos centrales en la elaboración de esos documentos, que han tenido que hacerse mediante una consulta estrecha con ellos, han dado opiniones, hecho sugerencias, han mantenido un intercambio fuerte con sus abogados, que tiene que ser en inglés, que es el idioma que hablan los abogados: lo han hecho cinco personas que están presas en cinco lugares diferentes de los Estados Unidos, aislados entre sí, muchas veces han estado en el hueco, es decir, aislados de su abogados, sin comunicación con nadie, ni con su familia. Imagínense ustedes lo que significó poderse comunicar, no tenían ni un lápiz.

Ha sido realmente una tarea titánica en la que ellos han estado en el centro. Todos los documentos han sido discutidos y aprobados por ellos. El valor intelectual de los Cinco lo medimos también por los documentos de los abogados, casi todos hechos por ellos mismos y no solo por sus magníficos alegatos ni los libros escritos por Tony y Gerardo, sin tener una biblioteca, sin tener un lápiz o una hoja de papel. Ha sido básicamente el esfuerzo de ellos lo que ha permitido muchas cosas.

No solamente han enfrentado las injusticias sino que además contra ellos se ha producido un trato cruel e inhumano, violaciones flagrantes de sus derechos y de todos sus familiares, incluyendo a los que se les permite ir, porque son visas que el gobierno de Estados Unidos da de la forma en que les parece. A veces han esperado meses. Los casos más dramáticos son los de las niñas que han visto al padre una vez cada un largo tiempo. Está también caso extremo de dos compañeras a las que no se les ha permitido nunca visitar a sus esposos, Adriana y Olga y la hija de esta y de René, la pequeña Ivette, la cual no se le ha permitido ver a su papá.

Y hay otras violaciones muy graves.

Por ejemplo, al Consejo Nacional de Iglesias de Cuba, que ha estado apoyando y tratando de promover la solidaridad especialmente en los aspectos humanitarios, se le ocurrió la idea excelente de pedirle al Consejo Nacional de Iglesias de Cristo de Estados Unidos -estamos hablando de las iglesias protestantes de aquí y allá-, de hacer una petición especial para que les concedieran la visa a Adriana y a Olga durante las celebraciones de Navidad. Hay que ver la respuesta que recibió el Consejo de Iglesias de Estados Unidos, es impresionante, un mensaje muy lacónico: un NO gigantesco. Ellos fueron al Departamento de Estado hablando en nombre de las Iglesias norteamericanas que se ofrecían además a actuar como garantes junto con la Iglesia de Cuba. La respuesta fue ese NO grande, decididos a no dar visa en ningún caso.
Paralelamente a eso hubo una gestión del mismo Consejo de Iglesias y del Consejo Mundial de Iglesias para que una religiosa cubana, Dora Arce Valentín, que es la máxima representante de una iglesia protestante aquí en Cuba y quien, además, fue compañera de estudios de Tony. Como religiosa siente el deber moral de acompañar a una persona que está condenada. No la dejaron entrar, y ahora acaba de reiterar la misma petición y la han vuelto a rechazar. Esto es una violación brutal.

Ahora mismo acaba de ocurrir otro hecho, con la Mirta, la mamá de Antonio Guerrero. Ella acaba de visitar a Tony en la cárcel. Tiene que concentrar las visitas, porque como las visas se espacian tanto, ella aprovechara los días que va y hacen varias visitas juntas, porque saben que al mes siguiente no van a estar allá. Ella fue con su nieto, el hijo de Tony, y llegaron a verlo el fin de semana, ya Tony no estaba ahí. Eso le dijeron, sin más razones. Lo movieron de prisión, a Springfield, Illinois, y Mirta perdió la oportunidad de verlo.

APOYO PARLAMENTARIO

Ya hay más de doscientos movimientos en todo el mundo y ha habido también una importante actividad a nivel parlamentario, en algunos ha habido acuerdos de solidaridad con los Cinco, reclamando que se ponga fin a esta situación. Es el caso de Cámara de Diputados de México, la Duma Estatal rusa… También, hubo dos reuniones reclamando las visas de Adriana y Olga, una fue en el Foro de Mujeres Parlamentarias de la Asamblea Conjunta ACP-Unión Europea, y la otra fue muy recientemente, en Venezuela en la Conferencia Parlamentaria de las Américas. Allí hubo una reunión de las mujeres parlamentarias y se aprobó también otro texto de solidaridad con este caso.

Hay un movimiento en varios parlamentos, en primer lugar en Parlamento Inglés, donde 112 parlamentarios han suscrito un documento que emplaza al gobierno británico para que se pronuncie por un nuevo juicio. Hay un movimiento semejante en el Parlamento de Irlanda, donde todos los diputados socialdemócratas suscribieron una carta y están pidiendo a otros colegas que se sumen. También, en el parlamento argentino…
Nosotros pensamos que, acercándonos a una fecha en la que se puede desatar el mecanismo que va a conducir probablemente más temprano de lo que pensamos a un fallo de la Corte de Atlanta, debemos reforzar, renovar todo el esfuerzo que hagamos como Asamblea e individualmente para que crezca y sea más eficaz la solidaridad internacional con estos compañeros.

Hay dos aspectos que tienen que ser destacados, el humanitario y referido a la familia y el hecho fundamental de que lo que el fondo de este asunto es exactamente la lucha contra el terrorismo. Sobre esto no debemos dejar de insistir. No es retórica nuestra. Durante el juicio el gobierno trató de evitar que fueran llevados a declarar conocidos terroristas de Miami, cómo no logró impedir que algunos fuesen, los amenazó delante del tribunal y de todo el mundo. Trataron de obligarlos a acogerse a la Quinta Enmienda, que es una cláusula protectora. El gobierno norteamericano, lo convirtió en un hacha, una amenaza. Lo que hizo el gobierno de Estados Unidos fue proteger a terroristas norteamericanos y castigar a Cinco compatriotas que tuvieron el valor y la dignidad de meterse en la guarida de ellos. Este es el tema que se supone que crea más preocupación en el mundo entero, la supuesta guerra contra el terrorismo, la lucha contra el terrorismo.

Por tanto, les propongo, en esta sesión de la Asamblea, que elaboremos algo bien concreto y simple que en esencia sea un reconocimiento a los parlamentos y las reuniones parlamentarias que se han pronunciado en este caso para pedirle además la continuación de esta lucha y dirigirnos al parlamento que hasta ahora permanece en total silencio, el de los Estados Unidos.

1 comentario

ME RESERVO MI DERCHO, POR MQUE VIVO EN UN PAIS LIBRE DE ANGUSTIAS.... -

AQUI EL SR. RIQUI, COMO LE DICEN CARIGNOSAMENTE LOS GAYS CUBANOS, ESTA DE ACUERDO CON LOS PLANTEAMIENTOS DE LOS 5 ESPIAS, QUE LES DEM MENOS COMIDAS ALLA EN LA CARCEL, Y LOS PONGAN A CORTAR CAGNA....COMO LO HACEMOS AQUI EN CUBA...